De idealistas para idealistas. Así de contundente enuncia la marca su propósito. Con una técnica exclusiva y una mano de obra excepcional, evolucionan el concepto establecido de los altavoces de bocina a un nuevo nivel de indiscutible referencia absoluta. Implementar la intransigencia frecuentemente alabada y construir productos de audio de alta gama sin limitaciones tonales: éste fue el objetivo con el que Cessaro Horn Acoustics comenzó en 2006 a revolucionar el sector de alta gama.
Con Cessaro, la gama alta no es sólo una palabra de moda. Significa la voluntad absoluta para comprometerse en la elección de los componentes más extremos sin reparar en las dimensiones de los modelos así como en los desorbitados gastos en artesanía. Son diseñados y construidos con un sólo propósito: reproducir una experiencia musical en vivo de la mejor manera posible. En este proceso se utilizan excelentes componentes y materiales exóticos que no son utilizados por ninguno de sus competidores debido a su estructura de precios. Esto distingue a Cessaro Horn Acoustics del resto.
Para confirmar estas elevadas expectativas, en la renovada gama actualmente en proceso se ha requerido del acuerdo con un referente tecnológico como es Leica Microsystems AG, encargada de proveer los tranductores donde no son implementados las unidades de TAD, marca recientemente absorbida por CESSARO, para evitar el uso de estos míticos dispositivos en otros fabricantes.
En lo positivo, la nueva actualización de gama implica importantes modificaciones que provocan una sustancial mejoría con respecto a los modelos anteriores. En contraparte el aumento de precios es muy significativo, no siendo óbice para el cliente al cual va dirigido la marca.
Llevado al mundo del automóvil, éste es un referente equivalente a Pagani Automobili; en la fotografía sería Leica; en los vinos, Château Pétrus.
Señores, estamos ante el epítome de la electroacústica mundial. Con esta marca se pregunta cuándo, no cuánto.
Saludos cordiales.
Blas Oliva